Peñarol y la gran pregunta: ¿Rinden jugando juntos Arezo y Abel?

Son los dos máximos anotadores del equipo en la temporada, aunque si están ambos en campo no convierten mucho. Pero…

Cuando Marcelo Bielsa era el técnico de la selección en Argentina a comienzos de este siglo se desató una gran polémica: él sostenía que Gabriel Batistuta y Hernán Crespo, dos supergoleadores mundiales por esos tiempos, no podían jugar juntos en el ataque albiceleste. El periodismo se lo reprochaba cuando faltaban goles y ni que hablar que fue la comidilla luego de la eliminación sufrida en fase de grupos en una Copa del Mundo a la cual los argentinos habían llegado como uno de los principales favoritos.

Desde entonces se han instalado, especialmente en el Río de la Plata, muchas discusiones sobre si dos goleadores pueden jugar juntos, sobre todo desde que el 4-4-2 se hizo un sistema tan habitual. Para muchos este esquema favorece la presencia de un doble nueve y para otros es necesario que uno de los dos puntas netos sea rápido para arrastrar marcas y abrir espacios para que el verdadero centrodelantero pueda definir.

Hoy, curiosamente con Bielsa asentado en Uruguay para dirigir a la selección celeste, el tema vuelve a estar sobre la mesa y en el fútbol local. ¿Pueden y deben jugar juntos Matías Arezo y Abel Hernández en la ofensiva de Peñarol? Se trata de los dos máximos anotadores que tiene el equipo en lo que va de temporada (13 tantos el primero y 7 el segundo, con lo cual suman más de la mitad de los goles convertidos por los aurinegros) y si bien ninguno de los dos atraviesa por un momento sublime, Abel viene de anotar un doblete en el triunfo 2-0 sobre Montevideo City Torque por lo cual para Darío Rodríguez se hará difícil sacarlo en caso de que Arezo se recupere de la lesión que le impidió jugar el lunes y esté a la orden el sábado a las 15.00 cuando Peñarol visite a Danubio.

Veamos números primero que nada:

• Compartieron campo en 13 partidos
• En 5 ocasiones estuvieron los dos desde el inicio
• Solo una vez compartieron cancha durante los 90′ y Peñarol perdió 0-2 con Millonarios
• De los 13 partidos con ambos en cancha Peñarol ganó 7, empató 3 y perdió 3
• Coincidieron durante 560 minutos en cancha
• Anotaron 5 tantos entre los dos con ambos en campo: 2 Arezo y 3 Abel
• Se combinaron solamente para un gol: pase de Arezo y anotación de Abel en el 2-0 a Danubio

De estos datos se puede deducir que a Peñarol le ha ido bien en cuanto a resultados con ambos coincidiendo en cancha, aunque ellos no han tenido una gran productividad juntos. Esto, no obstante, redunda en un beneficio colectivo ya que como la preocupación de la defensa se centra en ellos, los mediocampistas o extremos pueden encontrar espacios para anotar, porque en definitiva Peñarol lleva convertido 38 goles y ellos solo han aportado 5 (apenas el 13%) estando ambos en campo.

En cuanto a las características técnicas, ambos son centrodelanteros pero con características disímiles. Arezo es un jugador más potente desde lo físico, difícil de frenar cuando entra al área en carrera y además posee una muy buena pegada desde lejos, incluso en pelotas quietas. Abel es más ágil, más técnico, más veloz, apuesta más a la precisión que a la potencia y tiene muy buen juego aéreo; es capaz de hacer un dribbling corto dentro del área, mientras que Arezo es más de definir rápido, apenas ve el hueco consciente de que posee un remate muy fuerte. Un punto en común de ambos es la repentización en el área, sello de fábrica de todo goleador.

Por lo tanto, ante características distintas y en base a los buenos resultados que ha cosechado Peñarol cuando ambos están en cancha, la conclusión es que sí, pueden jugar juntos, pero es necesario que le hagan el juego por las bandas o desde la zona media con pases filtrados para que puedan hacer su trabajo, porque ninguno de los dos tiene el potencial como para desgastarse en pelear balones aéreos para bajarle al otro. Arezo y Abel necesitan que el arco les quede de frente. Cuando es así, ya han demostrado de todo lo bueno que pueden hacer.