Marcelo Bielsa y el mimo a Luis Suárez que puede cambiarlo todo
Foto: Juan Mabromata/AFP vía Getty Image
En días en que se especula con que la Copa América fue el último baile del Pistolero, el seleccionador de Uruguay reconoció que lo cautivó
La imagen de Luis Suárez volando por los aires impulsado por sus compañeros mientras sostenía la pelota con la que Uruguay había conseguido el tercer puesto de la Copa América 2024 o la del Pistolero siendo abrazado efusivamente por sus compañeros mientras él se enjugaba las lágrimas de los ojos hacía suponer un punto final para la carrera celeste del máximo goleador histórico de la selección.
Esa noche en Charlotte (Carolina del Norte) había estirado su leyenda, porque en el minuto 90+2 había convertido el 2-2 definitivo ante Canadá que llevó a la tanda de penales ganada por Uruguay. Ese tanto, salvador como tantas veces, había significado el número 69 y tenía pinta de ser el último.
Él se encargó, no obstante, de aclarar que no necesariamente todo esto que vivió en la cancha una vez finalizado el juego significa su adiós. “Me llevé la pelota como me había llevado la del último partido de Eliminatorias. Hasta un pedazo de red me llevé del Centenario. Uno nunca sabe si no fue la última vez y por eso lo vive así”, dijo el salteño tratando de llevar un poco de tranquilidad a los uruguayos.
No obstante, al otro día Lionel Messi dio una entrevista previa al partido final y cuando le preguntaron por Suárez dijo: “Yo siempre trato de apoyarlo. Esta era una Copa América muy especial para él por ser la última”.
A todo eso hay que añadirle que la cuenta de la Selección en X hizo unos posteos muy singulares, dejando entrever que horas más tarde el Pistolero jugaría por última vez.
Con 37 años es lógico pensar que este puede haber sido el último baile para Suárez, pero al final de esa jornada del sábado ocurrió algo importante, tal vez más de lo que muchos creen. Cuando el técnico Marcelo Bielsa se presentó ante los medios para hablar del partido por el tercer puesto lo consultaron sobre Suárez y dijo: “El nivel que mostró en los minutos que jugó, por un lado, en los entrenamientos, por el otro, el nivel técnico y físico dentro de sus características, no lo posiciona lejos de aspirar a compartir titularidad en la posición de centroatacante. Está en condiciones de disputar ese espacio legítimamente”.
¡Epa! De no tenerlo en cuenta, de no utilizarlo en el primer partido de la Copa América, de haber reconocido luego del partido con Colombia que debió haberle dado más minutos después de que no le dio ni uno frente a Brasil, hasta darle todo el segundo tiempo frente a Canadá, verlo hacer un gol, darle para disparar un penal en la definición y decir que está para pelearle el puesto a Darwin Núñez.
Y siguió: “Su actuación fue satisfactoria desde mi punto de vista. Aparte del gol, participó para encabezar algunos ataques que nos permitieron dominar momentos del partido y generar situaciones”. Para rematar: “Es un jugador que nunca lo había dirigido, pero sí lo enfrenté muchas veces con otros equipos y es super difundido todo lo que hizo en su carrera”. Haber compartido este tiempo con él confirma la imagen de un jugador superior, un gran compañero y para todos nosotros un apoyo enorme dentro y fuera del campo. Fue bueno haber contado con él”.
El refrán dice “más vale tarde que nunca” y si el clamor popular tuvo algo que ver en que Bielsa llevara a Suárez a la Copa América demuestra el conocimiento profundo futbolero del uruguayo. El seleccionador pudo comprobar lo importante que es tener una figura como la suya en un plantel repleto de jóvenes que idolatran aún al salteño.
Las palabras de Bielsa sobre Suárez no solo demuestran la vigencia del delantero salteño, sino también que quiere contar con él para los próximos partidos que se vienen por las Eliminatorias, esas que regresan en septiembre y por las que Uruguay disputará seis encuentros en lo que queda de 2024.
Fue un gran mimo el que le hizo el técnico argentino a Suárez, como para cautivarlo una vez más y quitar de su cabeza cualquier idea de retiro de La Celeste.