América es cuesta arriba para los uruguayos: tres victorias y cinco caídas

Nacional ganó sus dos partidos y Danubio uno, en tanto Peñarol y Liverpool perdieron ambos juegos

Los balances se hacen cuando termina un ejercicio, que para el fútbol uruguayo suele ser fin de año. Sin embargo hay etapas intermedias en las que se hace un repaso para saber dónde se está parado. Aún en este escenario es muy pronto para pasar raya, porque no ha terminado el Torneo Apertura ni la fase de grupos de los dos torneos internacionales (Copa Libertadores y Copa Sudamericana), pero los resultados cosechados por los representantes del fútbol charrúa llevan a hacer una breve memoria con dos extremos grandes: Nacional cosechó todos los puntos que disputó a nivel continental, en tanto Peñarol y Liverpool, ninguno.

Esta primera evaluación —hecha en una semana en la que de los 4 representantes uruguayos 3 perdieron y solo ganó uno y que no es definitiva ni mucho menos sino una simple muestra, pues falta más de la mitad de esta etapa de grupos— arroja como resultado que los equipos uruguayos obtuvieron solo el 37,5% de los puntos que disputaron luego de 8 presentaciones tomando en cuenta solo la fase en disputa. Se lograron 3 triunfos y 5 derrotas, sin que se registraran empates. Veamos uno por uno cómo van hasta ahora.

Nacional

Es el equipo que mejor performance internacional ha tenido defendiendo bien el hecho de ser el campeón uruguayo vigente. Ganó los dos partidos que disputó (2-1 como visitante a Metropolitanos en Caracas y 2-1 en casa frente a Deportivo Independiente Medellín) por Copa Libertadores, tiene puntaje ideal y es el único líder del Grupo B. Está bien perfilado para avanzar a octavos de final, pero quizás los más importante es que el equipo ha demostrado un crecimiento en el funcionamiento colectivo entre un partido y otro.

Desde la llegada de Álvaro Gutiérrez a la dirección técnica el tricolor solo perdió un partido y fue por el torneo local, aunque dolió porque se trató del clásico. Nacional acumula 4 partidos sin perder en buena manera porque está consiguiendo la solidez deseada, ya que —aun afectado por constantes lesiones— el técnico ha logrado establecer pequeñas sociedades primero para luego ir acoplándolas y así mejorar el funcionamiento colectivo. Su próxima presentación será el 3 de mayo en Porto Alegre ante Inter.

Liverpool

El negriazul no ha tenido un buen inicio de temporada. Tiene un muy buen plantel para la competencia interna y sin embargo está sexto, lejos de la punta; y en la Copa Libertadores su balance es absolutamente deficitario: perdió los dos partidos que disputó (0-3 en el Centenario frente a Corinthians y 2-0 en la visita a Independiente del Valle, por lo cual no solo no logró unidades, sino que tampoco anotó. Cierra el Grupo E y está obligado a vencer a Argentinos Juniors (que viene de vencer 1-0 a Corinthians en San Pablo) el 2 de mayo en Montevideo si aspira al menos a ser tercero y pasar a la Copa Sudamericana.

Danubio

La Franja ha tenido un rendimiento medio; aceptable tirando a bueno y lógico, porque ganó un partido (2-0 a Emelec en el Centenario) y perdió el otro (1-2 frente a Guaraní en Asunción), con el destaque de que en ambos juegos desarrolló un fútbol interesante, de propuesta, yendo al frente y siendo protagonista.

Le plantó cara primero a los ecuatorianos, uno de los equipos importantes de su país, y le ganó 2-0 superándolo ampliamente desde lo futbolístico. Tuvo la misma actitud en Paraguay e incluso se puso en ventaja con gol de Guillermo May (lleva 7 goles en 7 partidos), pero en el segundo tiempo se lo dieron vuelta y terminó cayendo 2-1 con Guaraní.

En ambos juegos ocurrió lo mismo: Danubio generó muchas situaciones de gol y no las concretó. Eso le hizo sufrir hasta el último minuto (cuando convirtió el segundo) contra Emelec y no asegurar al menos un punto en la primera mitad ante Guaraní.

Está segundo en el Grupo B y por diferencia de goles, porque los 4 equipos tienen 3 puntos al haber ganado y un partido y perdido el otro. Su próxima presentación será el martes 2 de mayo como visitante contra Huracán en Buenos Aires.

Peñarol

Toda una decepción la del aurinegro y no solo por las dos derrotas cosechadas (4-1 con América Mineiro y 0-2 ante Millonarios), sino por el nivel futbolístico demostrado. Es un equipo que viene de más a menos, porque comenzó el año con una gran solvencia y con el correr de los partidos se ha ido diluyendo.

Es cierto que ha sido golpeado por las lesiones, pero Alfredo Arias no ha logrado consolidar un funcionamiento adecuado. Tiene buenas intenciones, es verdad, porque el equipo intenta cuidar la pelota, ensanchar la cancha y dañar con velocidad por afuera para que sus goleadores (Matías Arezo y/o Abel Hernández) cierren la pinza por el medio y manden el balón a la red, pero está fallando en el toque final.

Incluso ante Millonarios en el Campeón del Siglo le costó pasar la mitad del terreno con balón bien jugado porque no consiguió completar pases relativamente sencillos. Según las estadísticas de Sofascore, Peñarol falló el 46% de los pases largos, es decir casi la mitad de los que dio. Así es imposible poner en carrera a un futbolista hacia el arco rival. Esto, a su vez, repercute en que el equipo termina fundido porque tiene que correr mucho detrás del balón. Como local y siendo el de la responsabilidad, el elenco aurinegro terminó perdiendo en posesión con Millonarios: 45% contra 55%.

En Sudamericana clasifica directamente a octavos de final solo el primero de cada grupo, en tanto los segundos tienen una fase intermedia contra los 8 equipos que bajarán desde la Libertadores. A esta altura Peñarol tiene comprometido incluso ese segundo puesto, porque en el plano internacional no se puede perder jugando en casa.